LA
INTOLERANCIA A LA LACTOSA
Está causada
por el DISACÁRIDO LACTOSA,
presente en la leche de vaca. En personas con intolerancia a la lactosa,
el sistema digestivo NO es capaz de digerir totalmente este
azúcar
de la leche, porque NO produce suficiente cantidad de una enzima
llamada LACTASA. Así que, en lugar de ser digerida y
absorbida, la lactosa permanece en el intestino y alimenta a las
bacterias de la flora, las cuales liberan ácidos
y gases que causan los síntomas como, DIGESTIONES PESADAS, FLATULENCIA, DIARREAS Y DOLOR
ABDOMINAL.
La
deficiencia primaria de lactasa, la prevalencia, y la edad de la manifestación,
varían
considerablemente entre los diferentes grupos étnicos.
El
único
tratamiento satisfactorio de intolerancia a la lactosa es una dieta con un
contenido nulo ó reducido de lactosa.
LA ALERGIA A LA LECHE
El
consumo de leche puede producir reacciones de alergia a
las proteínas contenidas en la
misma. La leche contiene más de 40 proteínas,
todas ellas posibles alérgenos. De ellas, las fracciones
sensibilizantes más frecuentes son: BETA-LACTOGLOBULINA,
ALFA-LACTOALBÚMINA,
SEROALBÚMINA,
CASEÍNA
y GAMMAGLOBULINA. Es frecuente encontrar sensibilidad a varias de estas
proteínas
de forma simultánea.
La
alergia a la leche ocupa el primer lugar en importancia entre las alergias
alimentarias en niños. Se estima que en España la incidencia está entre el 2%
y el 3%. La mayoría se resuelve espontáneamente para el segundo o el tercer año de vida
y a los 5 años
se han resuelto el 95% de
los casos.
Ésto se acompaña
con las manifestaciones clínicas usuales de las alergias que se
evidencian a nivel del sistema digestivo, respiratorio o dermatológico,
y cuya intensidad varía en cada caso. las manifestaciones clínicas
son inmediatas, apareciendo a los pocos minutos de la ingesta
OJO A ESTO!!!! Los alimentos
"sin lactosa" o "aptos para intolerantes a la lactosa" no
son aptos para personas con alergia
a la leche. La leche sin lactosa no
evita este problema porque es leche a las que se les quita la lactosa, pero
siguen conservando íntegras sus proteínas. Esta confusión
ha originado, en varias ocasiones, graves reacciones en niños
pequeños
alérgicos
a la leche, por haber consumido un yogur "sin lactosa"
(pero que sí
contiene leche) suministrado por personas que no eran sus
cuidadores habituales.
Todos
los productos alimenticios que contengan la lactosa, conforme el Anexo
II del Reglamento (UE) Nº
1169/2011 del Parlamento Europeo y del Consejo de 25 de octubre de 2011 sobre
la información alimentaria facilitada al
consumidor, ésta deberá ser
mencionada en el etiquetado de manera específica.
Esta norma se aplica a los operadores de las empresas alimentarias en todas
las fases de la cadena alimentaria, en caso de que sus actividades
conciernan a la información alimentaria facilitada al consumidor. Se
aplicará
a todos los alimentos destinados al consumidor final, incluidos los entregados
por las colectividades y los destinados al suministro de las colectividades.
Espero
que os haya servido la información este Post y
recuerda, EN
CASO DE DUDA CONSULTA CON TU FARMACÉUTICO,
y lo podéis
hacer dejando vuestros comentarios y preguntas.